Lo que pasa cuando intentas cerrar tu cuenta de Facebook.

Hace poco cerré mi  cuenta de FB. Fue un experimento, delicioso y ambicioso. No sólo por lo que implica el desapegarte de un fetiche con el que aparentas tener más de 500 contactos, entre amigos y conocidos, sino también porque básicamente después de tener tanta información allí es realmente imposible. 

Lo primero es decir que te vas, cuando lo haces, el sistema escoge a tres  o cuatro contactos cercanos y te dice “ellos te van a extrañar”, es más, lo hace con nombre propio: “María V te va a extrañar” , "Marta te va a extrañar" muy fuerte. Apreté los dientes y dije, bueno, sigamos. 

Luego viene otra pregunta, ¿por qué te quieres ir? para cualquiera de las respuestas hay una solución. Si dices que es por que es por falta de tiempo, te envían unos tips para sobrellevarlo, si dices que es porque te parece que el FB es inútil, te recuerdan algunas maneras de hacerlo más provechoso. En fin, el tema es no dejarte ir, como cuando llamas a Claro a decir que te quiten el internet, te pasan al asesor de “Fidelización”, es lento y aburrido, pero al final “el fidelización” te ofrece dos meses gratis, rebaja en la tarifa, etc,  que te quedas, y al final ya no te acuerdas por qué llamaste. Acá no te ofrecen rebajas porqué es gratis, pero te informan cómo hacer tu vida más fácil si te quedas, te ayudan con el malestar, no por algo necesitan tener más gente que consuma la publicidad que circula en el muro. 

En ese punto, cuando ya estás totalmente decidida a irte del mundo del FB, cuando das el clic final, el sistema advierte que por más que quieras irte toda tu información seguirá ahí y que puedes volver cuando quieras. Es decir, nunca se cierra tu cuenta, sólo dejas de aparecer en la lista de contactos. Le dije que si y estuve una semana sin FB, tranquila, pero totalmente aislada de eventos, notificaciones, grupos, alarmas y demás. 

Como todo mal necesario, empezó a emerger la necesidad de tenerlo,pese a sentir que no es 100 %  provechoso,  entonces caes en cuenta que los amigos que viven en el extranjero sólo están por FB, que los cumpleaños sólo se ponen por ahí y que en realidad nadie nota si te has ido. 

La cuenta se abrió, es decir, nunca estuvo cerrada porque FB nunca acepta un no por respuesta.