Un muñeco de nieve en el Caribe...

A mi esto de la navidad se me da mal. No entiendo bien esto de tener un muñeco de nieve en una ciudad del Caribe con 25 grados, tampoco porqué salimos como locos a gastar dinero que no tenemos y porqué hay un árbol de pino en donde se da bien la papaya.

Nos falta una navidad caribeña, una navidad que represente nuestra realidad y no sea un modelo importado. Por eso la tomo con distancia, un poco espulgando lo que más me gusta, que sin duda es la comida dulce y los momentos en familia. Para todo lo demás, está Master Card, y yo paso.  

Este año pido de deseo no saber tantas cosas sobre James Rodriguez, a cambio deseo conocer quién es mi vecina de al lado.  Deseo que los comentaristas deportivos dejen el complejo de inferioridad patriótico y dejen de informar lo que dijo o no dijo el técnico sobre él, si fue al baño o si se lesionó. En realidad eso es lo que menos importa, mientras nos matamos por la religión que nadie entiende. ¿Puede la gente religiosa sanar sus miedos sin dañar a otros? Religión y enfermedades mentales no hacen buen link. No sé que se puede mezclar con fundamentalismos.

Quisiera entender mejor la muerte y por qué mi amiga murió apuñalada en Bogotá para robarle. Nunca entenderé porqué algunos seres maravillosos no dicen adiós  y se los lleva la vida de forma incoherente, como si su bondad no les hiciera puntos para al menos no sentir dolor o miedo antes de morir.  Los primeros días no podía llorar, empecé a repetirme “ Es la voluntad de Dios, yo que sé”, buscando respuestas callé mi duelo, así que un día desperté llorando. Aprendí que no hay que temerle a las lágrimas y que los duelos hay que vivirlos como vengan.

Este año me visitó una novena. El día anterior me tuvieron que prestar un pesebre. Había que tener un escenario y yo seguía con mi casa sin adornar.La familia se divierte en mi casa, les toca apretaitos y comer cositas raras, pero se la gozan y entienden que no tenga luces, ni árbol. Les he prometido que para la próxima visita tendré una navidad Caribe o de pronto alguien de Todo Mono se inventa un adornito con el que me identifique más y hacemos algo un poquito más original, pero es que está difícil eso de ser creativo por estos días. 

La navidad es un poco artificial, lo que cuenta al final son otras cosas, la unión, los deseos para otros, los abrazos, la compañía. Cuando entendamos eso, tal vez, sentiremos que dura más.