No le pregunten a la reina
Esa mujer está ataviada con un vestido costoso, tal vez, lleva un corsé para lucir derecha, no ha comido en todo el día para verse más flaca, está montada en unos tacones incómodos de 7 centímetros, en las últimas semanas ha transitado por masajes lipo-reductores, preparadores de reinas y gimnasios y ahí, en directo para la televisión, ante la mirada de cientos de personas que esperan que se equivoque, queremos que diga algo inteligente. Pobre mujer, pobres reinas. Les exigen que respondan de forma interesante, preguntas como: ¿cuál es su libro favorito? ¿Por qué les preguntan eso? ¿para qué?¿qué sentido tiene? ¿demuestra así su personalidad "arrolladora"? Hasta el momento no hemos visto a la primera reina revelarse ante tanta tontería, deberían tener sus respuestas listas también, ante interrogantes como: 1. ¿Qué significa tu vestido? R/ La verdad no significa nada. Me gustó, me hace ver delgada y era el que podía pagar. 2. ¿Cuál es tu libro favorito? R/ No me gusta leer ...